Elegir un equipos portátil
Decidir qué portátil comprar puede resultar una ardua tarea. La oferta cada vez es más amplia y los fabricantes se afanan en sacar al mercado nuevos modelos como reclamo publicitario.
Primero, decide las pulgadas
No es lo mismo un portátil para viajar que otro para sustituir en casa a un ordenador de sobremesa. En el primer caso, el tamaño deberá ser menor, ya que el peso es un factor fundamental en el proceso de elección. Si buscas un portátil para moverte constantemente con él, no debería ser mayor de 15 pulgadas (mira también los de 13,3 y los de 12,1). Si lo que quieres es un ordenador para tenerlo en casa, puedes optar por los de 17 pulgadas y superior.
El Microprocesador
Actualmente hay dos grandes marcas que se reparten el pastel en el mercado de los microprocesadores: Intel y AMD. ¿Cuál de estas marcas supone la mejor elección? Eso es un eterno debate. A día de hoy ambos fabricantes ofrecen un 100% de compatibilidad con cualquier sistema operativo, así que en este sentido no debes preocuparte demasiado. ¿Qué modelo? Los dos fabricantes tienen modelos específicos para dispositivos portátiles que, al estar diseñados para trabajar a menor voltaje, consumen menos energía y disipan menos calor. En cualquier caso, ambos son procesadores de doble núcleo, el último factor que debes tener en cuenta es su velocidad. Nuestro consejo es que no te vayas a la máxima velocidad disponible en el mercado. El incremento de precio con respecto al modelo inmediatamente anterior es bastante alto para la mejora de rendimiento que pueda suponer. La velocidad máxima es una cota que los fabricantes superan casi cada mes, pero pongamos un ejemplo: Si en el momento de escribir este artículo la velocidad máxima disponible para el Intel Core 2 Duo en equipos portátiles es de 2.6 Ghz, elegir el modelo anterior de 2.5Ghz puede suponer un ahorro considerable.
La Memoria RAM
En cuanto a la cantidad adecuada de memoria RAM con la que tienes que configurar tu sistema, solo hay una regla a seguir: Para asegurarnos de que nuestro equipo va a mover con soltura los sistemas operativos y programas de última hornada, configúralo con tanta memoria RAM como te permita tu presupuesto. Debes tener en cuenta que, cuanta más memoria RAM tengas disponible, más programas vas a poder tener cargados de forma simultánea antes de que el sistema operativo empiece a hacer uso de la Memoria Virtual y de que el rendimiento de tu equipo caiga estrepitosamente. Conclusión, el mínimo que deberías considerar a día de hoy son 2 GB de RAM y eso debería ser, para la inmensa mayoría de usuarios, mas que suficiente. No obstante siempre es un dinero bien invertido, ya que va a ser en gran medida la responsable de que usar tu portátil resulte una experiencia agradable.
El Disco Duro
Elegir el tamaño del disco duro no debería ser una cuestión que te quitara el sueño. La mayoría de equipos estándar a día de hoy, disponen de discos de entre 120 y 160 GB como mínimo. Para instalar un sistema operativo y todos tus programas no vas a necesitar más. En este sentido, casi resulta más conveniente que te fijes en la marca de este componente y que exijas que sea de un fabricante de buena reputación. Acude a un vendedor de confianza y con experiencia y deja que el te asesore en este sentido. Dos marcas muy conocidas son Seagate y Western Digital, pero hay muchas más de buena calidad y reputación. Por lo tanto, un disco duro de 160 GB resulta más que adecuado para la mayoría de usos que se le vaya a dar un ordenador. Nuestro consejo es que utilices el disco duro de tu portátil para instalar tus programas y tener los documentos que mas necesites a mano y que delegues el almacenamiento masivo de películas, fotos, música, etcétera, a un dispositivo de almacenamiento externo USB, ya que a día de hoy ofrecen una capacidad de almacenamiento increíble a un precio realmente ridículo.
¿ Tarjeta Gráfica Aceleradora ?
Todos los portátiles obviamente tienen una tarjeta grafica incorporada, pero la tarjeta grafica aceleradora es algo que supone un extra. Las tarjetas aceleradoras, son placas que incorporan microprocesadores (GPU), específicamente diseñados para descargar al procesador principal de tu sistema a la hora ejecutar ciertas aplicaciones. Estas aplicaciones suelen ser video juegos, programas de diseño grafico y/o modelado 3D y cualquier software de edición de video. Plantéate seriamente incorporar una tarjeta aceleradora, siempre que tu portátil vaya a estar destinado la mayoría del tiempo a ejecutar aplicaciones de este tipo. La mejora en el rendimiento y en la experiencia de usuario que aportan es decisiva. En el caso de que el uso que vayamos a darle a nuestro equipo, se centre más en ejecutar suites ofimáticas, en leer el correo, en ver nuestras pelis/fotos y en navegar por internet, la tarjeta aceleradora es un extra que vamos a pagar para nada y que puede encarecer considerablemente el precio de nuestro equipo.
Otros aspectos
- El diseño: Siempre y cuando sea algo que nos preocupe.
- La ergonomía: Sobre todo si pensamos pasar mucho tiempo delante de él.
- La calidad de los acabados: Tener en cuenta que es lo que protege nuestro equipo en caso de golpe accidental.
- La autonomía: La autonomía mínima que se le puede pedir a un equipo son 2 horas y media.
Finalmente, esto no debe ser considerado como la guía decisiva a la hora de elegir vuestro portátil. Más bien pretendemos ser una primera orientación, para ser más conscientes con las necesidades y que termine con la compra de vuestro portátil ideal.
